Al centro de nuestro trabajo se encuentra la temática de la Protección Social. Sin embargo, abarcamos áreas tan diversas como descentralización, gestión pública e institucionalidad, pobreza, educación y cultura, grupos prioritarios, drogas y seguridad ciudadana, vivienda e infraestructura, territorio, trabajo, formación y capacitación.
En la actualidad, el trabajo de Asesorías para el Desarrollo prioriza 6 áreas de desarrollo:
En esta área se visualizan dos focos: uno de tipo institucional, donde se observa la gestión, tanto a nivel de sostenedores como de establecimientos escolares y los programas de apoyo a éstos; y otro de tipo más analítico, aportando en temas de efectividad escolar, de mejora de la escuela y análisis del sistema escolar en su conjunto, la mirada de padres y apoderados sobre el mismo y como éstos se enfrentan a la elección de colegios. Dos focos complementarios son el área de los centros de producción científica y la educación preescolar. En base a esta experiencia, estamos aportando más directamente a la asesoría a instituciones educativas.
El foco en esta área está puesto en cómo se vincula el concepto de descentralización con las características que tiene o debería tener el desarrollo de territorios en espacios subnacionales. Entre otros temas buscamos vincularnos con los actores locales y conocer del capital social existente en regiones. Nos interesa también identificar y trabajar con los espacios formales de acumulación de conocimiento existente en regiones, de modo de desarrollar iniciativas que contribuyan a mejorar la los estudios realizados en este ámbito.
Esta área se preocupa por la reflexión teórica acerca de las corrientes de pensamiento predominantes en materias de protección social, derechos de ciudadanía y política social; el análisis de la forma en que dichos enfoques orientan la toma de decisiones de política pública; y la consultoría en aspectos de diseño, implementación y evaluación de políticas y programas sociales dirigidos a grupos prioritarios de la población (pobres, jóvenes, mujeres, adultos mayores, etc.).
En esta área, nuestro enfoque se caracteriza por comprender la actividad laboral como un espacio de integración y movilidad social. Nos interesa conocer en qué medida distintos programas públicos contribuyen a que las personas –especialmente en situación de vulnerabilidad- accedan a un empleo y mejoren su empleabilidad (competencias laborales, capacitación y formación para el trabajo). También nos preocupa la manera en que diferentes tipos y condiciones de trabajo afectan la vida de quienes ya están insertos en el mercado laboral (trabajo decente, calidad de vida en el trabajo, riesgos de salud ocupacional).
Esta área, de carácter emergente, surge del desarrollo de estudios que evalúan programas sociales de vivienda y pretende desarrollar la reflexión y observación sobre el territorio y sus entes poblados, en particular en lo que dice relación con la producción social del espacio y de la ciudad, especialmente en contextos de vulnerabilidad y pobreza.
La definición de políticas adecuadas para este sector es un ámbito de interés a partir de la pregunta acerca de la democratización de la cultura y sus potencialidades para el desarrollo social de las comunidades. Desde este punto de vista, nos interesan tanto las prácticas que se dan al interior de comunidades y agrupaciones ligadas a la producción cultural y a las condiciones en que se desempeñan los trabajadores del campo cultural, como las posibilidades de acceso y participación de distintos grupos sociales respecto de manifestaciones artísticas y culturales y expresiones de patrimonio.